De Amores y Traiciones 02

Así es Maria; Capaz de recordar cada cosa, aun los nombres de mis amigos a los que solo los había mencionado una vez, sin embargo para ella era importante recordar cada cosa que yo le decía; Y eso me hacia sentir feliz y amarla cada día más.
Y si, la amo, y fue así desde que nos conocimos y hablamos toda aquella noche justo después de su primera visita al Perú, esa misma noche cuando nos chocamos por casualidad en una café de lima, mientras ella trataba de encontrar un numero telefónico perdido dentro de su cartera y yo la observaba con suma curiosidad.
No sé que fue exactamente lo que me llamo la atención hacia ella, solo recuerdo haberla visto sentada en la mesa frente a la mía, con actitud de estar muy preocupada y asustada tratando de hallar algo que al parecer era muy importante para ella. De pronto levanto su mirada, como buscando ayuda y allí estaba yo, listo para hablarle, saber quien era y tal vez así, haciendo una nueva amiga, despejarme un poco de las cargas que había traído consigo aquella semana.

Caminamos por lima y charlamos sobre las razones por las que ella estaba en lima. Tenia algunos amigos aquí, los había conocido en México y ahora ella, venia a verles y a distraerse un poco.

Fue allí que empezó todo, o al menos eso creo, ya que esas fueron dos semanas maravillosas, no sabia que me estaba pasando, ni que era lo que estaba haciendo, solo que era tan grandioso pasar mi tiempo a su lado que olvide casi todo, hasta que una llamada por la noche me devolvió a la realidad.

- alo
- ¿Dónde estuviste todos estos días? Trate de ubicarte pero nunca estas en casa,
¿ Ha pasado algo?
- No amor, nada. Solo andaba muy ocupado. Siento no haberte llamado por estos días, pero ¿ cómo te va en tu congreso?
- Bien, y adivina que..... vuelvo una semana antes, el lunes
- ¿ Que? ¿ Porque?
- Amor, parecería que no quisieras ver a tu prometida. O es que en estas semanas que estuve fuera de lima conociste a alguien.
- No, no es eso, solo me sorprendiste, no te esperaba tan pronto, pero estoy feliz de verte.
- Me alegra, yo también té extraño, solo te llame para decirte esto, espero verte en el aeropuerto, recuérdalo en 3 días a las 10:30 PM.
- Estaré allí.
- Te amo, bye
- Bye.


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Roxy era mi novia, bueno, aun lo es. Y no es que no la amara, sino que en los días con Mariah, por alguna razón no había pensado en ella y ahora llamaba para decir que volvía a lima y justo el día que Mariah volvía a México. No sabia que hacer, estaba confundido, sabia que roxy no se merecía esto, pero Mariah era alguien tan especial que el solo hecho de pensar en que se iría me aterraba. Sin embargo decidí no decirle nada y el día que salió su vuelo, le mentí diciendo que prefería no ir debido a que odiaba las despedidas. Pensé que allí acabaría todo, ella volvería a su país, a su vida y nunca me recordaría, sin embargo no comprendí hasta mucho después, de cuan grande y complicada era la situación en la que me había empezado a enredar.

Aunque tal vez no lo crean, entre Mariah y yo, mientras estuvo en lima, no sucedió nada mas allá de miradas y sonrisas sostenidas, cierto, jamás nos besamos, ni dijimos, lo que íbamos sintiendo.
No fue hasta dos semanas después de su partida y ya con mi novia otra vez en lima, que recibí su primera carta...... la primera de una cadena que perduro por algunos años.

San Luis Potosí. S.l.p. 07 de agosto del 2000
México 23:15 hrs.


Javier gamarra.

Hola¡ hoy precisamente recordaba que hace dos semanas que salí de lima... y no he dejado de pedirle a dios que te encuentres bien y siento que lo estas.
Este mes se ha ido relativamente rápido. Tan es así que ya en unos 20 días mas voy a tener vacaciones..... y lindas vacaciones voy a tener¡

Estaré estudiando para presentar el examen de calculo ( esa escapada a lima me ha dejado completamente perdida en lo que ha las clases se refiere)... suena frustrante pero el examen será a titulo de suficiencia y creo que no estará nada fácil... pero no me queda nada mas que ponerle todas las ganas del mundo para aprobar la materia.

Zaz... hoy tuve que exponer una clase de biología y como nunca me sentí terriblemente nerviosa y por lo tanto helada quien sabe porque... lo bueno es que para suerte mía, me fue rebién.

Por cierto, Edith te envía muchisisimos saludos, me pregunta que si he tenido noticias tuyas desde mi partida de lima y le contesto que hasta donde yo se debes estar rebién, tanto que ni siquiera has podido escribirme... plop.
Ella como que medio ha reconsiderado nuestra amistad y me ha devuelto un poco la confianza... al parecer tiene serios problemas en su casa. Pero lo malo de todo esto es que no permite que le ayude..... en ocasiones no sé ni como actuar.

Ayer fui a la huerta de un amigo a festejar su cumpleaños... preparamos carne asada y como llevaron guitarras, estuvimos cantando un rato y a la mayoría nos invadió la nostalgia y el llanto barato hizo acto de presencia.
Regrese a casa como a las 9:30 PM, pues como ya hace mucho frió en estos días me empezó a molestar un poco la espalda, pero para mi salvación lo controle con una inyección ( la llamo “ inyección mágica” pues me quita el dolor en un poco mas de 30 min... eso sí, no te es posible sentarte cómodamente en unos 4 días...... ja, ja, ja. Y como digo, hoy estoy mas fresca que una lechuga y me siento súper bien.

Quizás esta carta por el momento te haya parecido corta... pero.je, je, je,, ya otro día ( la prox. Semana) te envió algo mas.


Saludos al apestoso.

Cuídate muchísimo ( en extremo)

Por piedad ¡ escribe muy pronto.


Que dios te bendiga.

Hasta siempre


Maria Alvarado r.



¿Qué quien es el apestoso? Bueno, esa es otra historia. Tiene que ver con la penúltima noche que Mariah paso en lima y ya íbamos pensando en el hecho de que pronto nos separaríamos. Ambos pensábamos demasiado en eso con cierto temor pero no queríamos preocupar al otro sobre el tema. No pude soportarlo mas y le dije que no sabría como haría cuando ella no este; me miro fijamente y note una lagrima que asomaba sobre sus ojos, la abrasé fuertemente y le dije que no había porque sufrir, que me sentía igual de mal pero que ella estaría mejor pronto, con sus amigos y parientes en su país; además podríamos llamarnos y escribirnos, aunque claro esta nada compensara totalmente su ausencia. En ese instante su rostro se ilumino con una sonrisa en medio de su humedecido rostro.

Ya lo tengo – dijo – ahora sé quien podrá cuidarte cuando no este.

¿ De que hablas? – pregunte – acaso piensas quedarte.

No. Pero quiero dejarte a alguien. Cuando mi hermano estaba a punto de morir y noto que yo estaba cada día mas triste por su enfermedad, me lo dio y dijo que cada noche, cuando piense en él, abrazándolo podría sentir que no estaba sola y que el me acompañaba.
Maria se levanto y casi tirando de mí, me condujo a su hotel, me hizo esperar a un lado y fue a su cuarto, hablando consigo misma.

Fue allí cuando me lo dio, era un pequeño oso de peluche, todo blanco, en actitud de dormir sobre una pequeña almohada. Me dijo que ella amaba a aquel muñeco y que quería que yo lo conserve hasta que nos volvamos a ver, así, parte de su amor quedaría conmigo.

Me contó que lo bautizo con el nombre de apestoso, porque cuando su hermano se lo dio, al parecer, se excedió un poco en la cantidad de olor que le puso al peluche y era tan fuerte que no la dejo dormir aquella noche ( y varias mas ja, ja, ja). El olor se había ido ya, pero no el recuerdo del hermano ido, dude en aceptarlo pero la vi tan decidida que acepte agradecido y desde aquella noche, el “ apestoso” esta junto a mi almohada haciéndome recordar que en otra parte de este gran mundo hay alguien que también esta pensando en mi, tanto como yo en ella.

Aquella noche hablamos hasta muy entrada la noche, hacia frió y note que su rostro ciertas muestras de dolor; al principio supuse que se debía a la cercanía de su partida, sin embargo, luego note que era mas que eso.

- Es un problema en mi columna – dijo – y se agrava un poquito con el frió.
- ¿ Pero que tipo de problema es exactamente?
- Es una vértebra fuera de lugar. Realmente solo esta un poco fuera de lugar, y hace presión sobre algunos nervios y produce muchísimo dolor, sin embargo con en el tratamiento que llevo, han logrado aliviarlo.
- Solo aliviarlo. ¿ Pero no podrán curarlo?
- Los doctores dicen que con una operación talvez podrían solucionarlo, aunque sería muy riesgoso y yo no quiero hacerlo. Tengo miedo.
- Pero si no te operas ¿ qué podría suceder?
- Mejor cambiemos de tema. No quiero hablar de esto, por favor.
- Esta bien, solo quería saber; talvez podría ayudar......
- No, Javier, solo ayúdame quedándote a mi lado, eso es la mejor ayuda que me has dado, en todo este tiempo jamás había sido tan feliz como lo soy contigo, disfrutemos esto y déjame olvidar lo otro como hasta ahora, ya cuando salga de aquí habrá mucho tiempo para eso.
- Pero prométeme que me lo dirás, que me tendrás en cuenta para lo que sea que te pase.
- Lo haré, lo haré, pero ahora sácame de aquí y hazme sentir que no tenemos que volver nunca.